Si bien hemos visto la evolución del thrash a partir de 1980 ahora tocaría preguntarnos de dónde viene exactamente y cuáles son sus influencias.
Cuando vemos los videos de primeros Metallica, acostumbramos a ver a un joven James Hetfield con una camiseta de los Misfits. También su bajista Cliff Burton lucía un tatuaje de la calavera de los Misfits en su brazo derecho, Dave Mustaine fue un fan incondicional de los Sex Pistols y Anthrax tienen unos riffs claramente de influencia punk. Como Cronos (Venom) declaró en varias entrevistas “queríamos mezclar lo sucio del punk con el heavy británico”. Sí, el punk es una base fundamental para el thrash. Incluso en la vestimenta del “thrasher” podemos observar
guiños hacia la estética punk: vaqueros de pitillo rajados, parches y remaches en las chaquetas, una cierta atracción hacia la anarquía… Tampoco olvidemos que el mosh (pogo, pateo, etc) es originario de los conciertos de punk.Otro pilar fundamental del thrash es la NWOBHM. Si bien contamos con que Venom participó en esta ola de metal británico (no en vano se llama Nueva Ola de Heavy Metal Británico) grandes influencias de los primeros grupos thrashers son Iron Maiden, Motörhead, Judas Priest o Saxon, siendo fundamentals los tres primeros. Técnicamente, el thrash metal deriva del speed metal de la mano de Accept y
Motörhead, influencias que perfectamente se pueden ver en grupos como Metal Church u Overkill.Fuera de lo musical, todo seguidor del heavy metal sabe (o si no, lo descubrirá) que una gran mayoría de los thrashers sienten admiración a la obra y a la persona de H.P. Lovecraft (escritor). Les apasiona la Historia, en especial las guerras y, dentro de ellas, la II Guerra Mundial. Sienten cierta afinidad al cine de terror, a las catástrofes nucleares y a la violencia, y su bebida preferida es la cerveza. Todos estos tópicos se ven claramente reflejados en las letras de las canciones de prácticamente todos los grupos que practican thrash.
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